CERDITA es el primer largometraje de Carlota Pereda protagonizado por Laura Galán.
Con guion original de la propia directora y rodado en Extremadura, la película está inspirada en el corto homónimo que obtuvo un gran reconocimiento dentro y fuera de nuestras fronteras, con premios tan importantes como el premio Goya y el José María Forqué al Mejor Cortometraje de Ficción, o el prestigioso Slamdance Russo Brothers Fellowship (beca para un cineasta otorgado por los hermanos Russo, directores de Los Vengadores o Capitán América).
CERDITA es un thriller rural lleno de tensión, venganza, miedo, polvo y sudor, está protagonizado por la actriz Laura Galán (aclamada protagonista del corto Cerdita, también ha participado en títulos como Orígenes Secretos y El hombre que mató a Don Quijote o la serie Cuerpo de Élite), Richard Holmes, Carmen Machi, Irene Ferreiro, Camille Aguilar, José Pastor, Fernando Delgado-Hierro, Julián Valcárcel, y el joven Amets Otxoa. Cuenta con la colaboración especial de Pilar Castro y Claudia Salas.
Equipo técnico
Destacan en el equipo técnico los nombres de Rita Noriega en la dirección de fotografía; Sara San Martín al frente del equipo de dirección; Clara Salvador como jefa de producción y localizadora; Nicolás Mas en sonido, Arantxa Ezquerro como figurinista; Paloma Lozano en maquillaje; Óscar Sempere en la dirección de arte y Olivier Arson a cargo de la música.
El montaje es de David Peregrín y, al frente de la dirección de producción, ha estado Sara García. De la elección de castings se han ocupado Arantza Vélez y Paula Cámara. María Soler, ha sido supervisora de producción por parte de MORENA FILMS y Merry Colomer, productora ejecutiva de la productora, ha liderado este proyecto en el que la mayoría del equipo son mujeres.
Sinopsis
Para Sara el verano solo significa tener que soportar las continuas burlas de las otras chicas de su pequeño pueblo. Pero todo terminará cuando un desconocido llegue al pueblo y secuestre a sus acosadoras.
Sara sabe más de lo que dice y tendrá que decidir entre hablar y salvar a las chicas o no decir nada para proteger al extraño hombre que la ha salvado.