Más de 10 años después respecto a la última entrega llega esta reactivación de las películas xXx, una saga destinada al público joven y con más sed de adrenalina.
Toda la serie se basa en las misiones de unos mercenarios liderados por el personaje interpretado por Vin Diesel. Guapos, fuertes, entrenados en el uso de las más diversas armas y los más espectaculares deportes extremos, cada película encadena una serie de secuencias de acción que buscan superarse en cada entrega en capacidad de asombrar a su público objetivo.
Crítica
Como pasó con sus predecesoras, la dirección ha sido puesta en manos de un director experto en el género. En esta ocasión, D.J. Caruso solventa con creces el encargo aportando un plus de estilización estética que quizá no había en las anteriores. No se trata de hacer cine en el sentido artístico del término sino un producto eficaz y sin aristas que se pueda vender en todo el mundo. Algo que es fácilmente palpable en su multicultural elenco que va desde la representación filipina al guiño brasileño con la aparición del futbolista Neymar jr. Los más cinéfilos podrán disfrutar de Toni Colette.
XxX: Reactivated cumple a la perfección su cometido con escenas de acción y violencia asombrosas que van desde la automención a la inverosimilitud, algo que se mantiene entrega tras entrega casi como una característica y guiño de humor. Se trata de molar, de crear o poner de manifiesto tendencias de moda, tatuajes, respuestas ocurrentes, actitudes macarras… patrones de comportamiento, a fin de cuentas, que ayuden a sobrevivir a sus jóvenes espectadores en el mundo que les ha tocado vivir. Formar parte de la tribu y su cultura.