¿Alguna vez has tenido un déja vu?
¿Alguna vez has conocido a una persona que crees que ya conoces?
Nora (Saskia Rosendahl) y Aron (Julius Feldmeier) se conocen un día de lluvia en el metro y sienten que están predestinados a vivir juntos.
Crítica
Mucho se ha escrito y filmado sobre la naturaleza del amor y el destino. Si se trata de algo prescrito, causal o casual. Si lo controlamos o nos descontrola; si lo podemos obtener con empeño o es mejor dejarse llevar.
Relativity es un filme alemán que indaga sobre todas estas circunstancias sin dar ninguna tesis por válida. Es el devenir del guión y las escenas, con oportunos guiños a la física, las que permiten al espectador construir la suya propia, sus propios argumentos y explicaciones a la génesis de los sentimientos.
La cineasta alemana de origen japonés Mariko Minoguchi debuta satisfactoriamente con esta cinta logrando que su alambicada historia se reconstruya a cada paso en nuestra cabeza, reordenando de nuevo hechos y personajes para demostrarnos que quizá la hipótesis que habíamos trazado como cierta sólo era fruto de una ilusión. O al revés.